Fui a trabajar en moto a pesar de la alerta de galerna que entraba por Galicia y que afectaría a la costa asturiana a partir de media tarde.
A las cinco y media de la mañana había una madrugada preciosa, estrellas, luna y una temperatura de 10º bastante agradable, así que a currar en La Madreña Veloz, que los del tiempo fallen más que una escopeta de feria.
¡¡¡¡Ay al salir!!! llevaba amenazando llover toda la mañana, y a la hora de salir cuatro gotitas, pero llegando a Gijón empezó a llover como cuando enterraron a Cristo.
Me acojoné un poco y bajé gas. Con el Xciting ya estaba acostumbrado, pero con la V...
Pero lo más importante es la conclusión que saqué de mi equipación.
Chaqueta y pantalón Bering (estupendo, sin el forro de invierno y no me mojé. Guantes de invierno empapados, aunque no calaron.
El casco...
malo de solemnidad, le entra agua por todos lados. Es muy guapo y todo eso, pero no vale para nada es de la marca Bultaco (o por lo menos trae esos anagramas), además no es ni integral ni modular, es de esos que solo llevan un cristalín que sube u baja: fiasco total, ya, ya, ya me sacudo yo 
Y lo peor lo de las botas, simplemente: no tengo. Ando con unos todoterreno medio de monte que me van muy bien, pero claro, para esas condiciones no, resultado: pies pingando.
No sé qué botas voy a comprar, quiero unas flexibles, que sienta la palanca y que la suela se deslice sin obstrucción por las estriberas, ya, ya vuelvo a darme yo
Saludos.
(la jefa aún se está descojonando de la risa 
), y ahora cuando las pongo las noto muy comodas 
, incluso no me molestan mucho para caminar.
