Espero que paséis un buen rato leyéndola y disfrutéis con imagenes de una zona incomparable.


El viernes, 13 de mayo a las 08.00 horas, habíamos quedado en el punto de encuentro habitual para tomar un café e iniciar el viaje hacia Avila.
Tras reunirnos en Fraga con otros compañeros del CAT seguimos rumbo a nuestro destino.
A mediodía paramos a comer en un restaurante de Medinaceli y sobre las 19.45 horas, después de 722 Km., habíamos llegado al hotel de Vicolozano.




Tras saludar a los compañeros que ya habían llegado, darnos una reconfortante ducha y ponernos cómodos, salimos del hotel para ir a cenar a un restaurante cercano.
Sopa castellana y chuletón de Avila... deliciosos platos que no dejaron indiferentes a quienes los probaron.




Después de la cena, un buen rato de conversación y risas dieron paso a una especie de "botellón".




Y como "fin de fiesta"... degustación de embutidos extremeños por gentileza de los compañeros del V-Extrem.



A las 09.30 de la mañana del sábado l@s asistentes al evento empezaron a llegar a la zona de reunión establecida ya que la ruta daba inicio a las 10.00 horas.
Poco después de la hora prevista salimos dirección a Avila y al paso por la misma pudimos contemplar sus espectaculares murallas.




Tal era la cantidad de motos asistentes que pasados pocos kilómetros fué necesaria una primera parada para reagruparse. A partir de ese momento empezamos a disfrutar de carreteras que atravesaban zonas de gran belleza.




La organización "deleitó" a algun@s con un mini-tramo (subida) de off-road !!.


A partir de ese momento ya enfilamos hacia el puerto de Mijares.
La subida al puerto fue espectacular. Una carretera revirada y con un asfalto en el que se debía estar "prevenido", dieron paso al puerto.
Allí estuvimos admirando el paisaje y recreándonos con las vistas del valle.





Pasado un buen rato se emprendió la bajada y se puso rumbo a San Esteban del Valle ya que en esa población estaba el restaurante donde tendría lugar la comida.




Durante la comida empezó a llover y se tomó la decisión de acortar la ruta para ir directamente al hotel.
El obligado paso por el puerto del pico se hizo bajo la lluvia. A pesar de todo, las vistas seguían siendo impresionantes.



Finalizada la ruta, duchados y vestidos con ropa cómoda, fuimos a visitar la iglesia de Vicolozano y sus alrededores.
Posteriormente cenamos en el mismo hotel, charlamos, compartimos sobremesa y apuramos los últimos momentos antes de ir a descansar.


El domingo por la mañana, tras un buen desayuno, nos despedimos de l@s compañer@s y fuimos a Avila para visitar el casco antiguo y sus murallas.
Tras la visita iniciamos el camino de regreso.



Al final, el viaje se saldó con un fin de semana genial, visitando una zona encantadora, disfrutando de buena comida y mejor compañía... y con 1.790 Km. más en la moto.

Más fotos, aquí...
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