El sábado 3 de septiembre amaneció fresquito y algo nuboso, para estas fechas una climatología ideal, así que sin prisas, sobre las 10:00 a.m. salimos dirección Antequera.
Tras desayunar y unos kms. pasado Almargen encontramos el cruce:
Al instante Teba y su castillo aparecen ante nosotros en la cima de una colina, la carretera promete y nos empeñamos en los últimos kms.
Subimos por una carretera estrecha con unos quitamiedos que no hacían gala a su nombre y en poco tiempo nos adentrábamos en la villa buscando la subida hacia el castillo.
Después de un par de vueltas un personaje peculiar se nos aparece. Un legionario, seguro retirado, algo tosco, amigable y de edad avanzada aparece de repente sobre una antigua moto de 900 cc que ni siquiera reconozco, nos dice si puede llevarnos a algun sitio y por supuesto y sin más peros le seguimos hacia la subida última al castillo.
Estos últimos tramos hasta el aparcamiento son un poco escabrosos ya que la pendiente es grande y las curvas cerradas. Aparcamos y nos dirigimos ya andando hacia el fortín. Abajo Teba se abre ante nosotros.
La entrada principal.
El recinto.
Observamos que una escalera se dirige hacia la torre principal y como se encuentra abierta decidimos subir a ver que hay.
Para nuestra sorpresa lo primero que vemos son unos frescos medievales por las paredes...¡ vaya ! pues sí que parece esto interesante.
En un pequeño mostrador nos recibe una atenta señorita que tras saludarnos nos pregunta: "¿que vienen por lo de Williams Douglas? :shock:
¿Qué?, amablemente nos cuenta la historia.
Durante el reinado de Alfonso XI, el reino nazarí de Granada tenía sus últimos bastiones entre Granada, Antequera y Ronda. Las contínuas escaramuzas traían en jaque a los cristianos por lo que el rey decidió preparar un ataque a la comarca del Guadalteba. Un grupo de caballeros templarios escoceses que marchaban hacia tierra santa recalaron en Sevilla, comandados por William Douglas, amigo del Rey escocés y amigo de Braveheart decidieron unirse a la tropa que asaltaría el castillo de la Estrella.
Sir William Douglas murió en los enfrentamientos y en agradecimiento el pueblo de Teba celebra todos los años unas jornadas en honor del citado caballero.
La verdad que el estado ruinoso exterior no aparenta lo bien conservado del recinto de la torre.
No, no era Dar beider...pero casi :D
Imágenes del exterior.
La subida desde el pueblo al castillo.
A la hora del almuerzo y sin ninguna referencia, guiados por el olfato, literalmente, dimos con un buen lugar de pitanza, Bar Cortijo del Molino Lucero, en la rotonda del cruce hacia Campillos. Unas raciones de buen tamaño y precio y una carrillada para quitar el sentido ;)
A unos tres kms. escasos dirección Campillos vimos el tajo del Molino, area recreativa con piscina natural y una garganta por donde discurre el arroyo La Venta donde se practica la escalada.
Aprovechando la cercanía de Campillos aprovechamos para visitar el outlet de la fabrica de Zerimar donde siempre hay cosillas interesantes para renovar nuestros atuendos de romanos.
Ya por la tarde pondríamos dirección a casa con la satisfacción de haber descubierto un nuevo e intersante lugar más para la agenda, un día de turismo y pitanza estupendos. :)
