Aprovechando que el médico me había dado el alta, fui a dar una vuelta en moto.
En algún lugar leí que cerca de la villa de Ager hay una vía romana del siglo II.
Así que después de comer, saliendo de Lérida por la C-12, después de cruzar Balaguer y siguiendo de nuevo por la C-12 subiendo la sierra de Montclús para ir a buscar el puerto de Ager.
Des de el puerto de Ager con la sierra del Montsec al fondo.
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En vista de que el paso de la vía estaba en muy mal estado para poder entrar con la moto decidí ir por la carretera y bajar al pueblo para ver si encontraba otro lugar desde donde poder acercarme a la vía romana.
A los pocos metros distinguí una pista de tierra, ancha, todo parece indicar que no hace mucho que la han construido ya que la tierra esta toda suelta y los márgenes están muy bien marcados.
Empiezo a bajar con la esperanza de que pase cerca de la vía romana.
! Y suerte!
Detalle del "asfalto"
La verdad es que esta en mejor estado de lo que me esperaba.
Se dibuja perfectamente el trazado.
No me puedo resistir y a pesar de ir solo me decido a pisar, como un soldado romano a lomos de mi caballo de hierro por encima de esta vía milenaria.
Es una sensación extraña pero me gusta.
Paro la moto me siento en el suelo a percibir la paz del momento
Hace tantos días que no cojo la moto que lo necesitaba.
Siguiendo mi nueva ruta voy a parar al Pont de En Rossell en la entrada de la población de Ager.
Franqueo el pueblo buscando la C-12, la carretera que me ha de llevar hasta casa. Y cuando ya la encuentro veo un cartel que me indica "Parque Astronómico del Montsec". http://www.parcastronomic.cat/parc-astr ... ontsec.php.
Y me digo -¿Por que no?
Sigo por una carretera recién asfaltada hasta encontrarme el parque.
Son las 17:45 h intuyo por la gente que hay haciendo cola en la puerta que no falta mucho para que abran las puertas.
Pero hoy no tengo ganas de quedarme, ¡me voy! - ¡Otro día será!.
Vista del Parque Astronómico con Àger y la sierra de Montclús al fondo.
Sigo subiendo por una carretera estrecha hasta coronar el paso de Ares, por la cara Sur.
Arriba del Puerto hay una vista espectacular, al Norte se ve todo el Pirineo y en el Sur toda la llanura de Lleida. Lo que nosotros llamamos El Pla de Lleida (La explanada de Lleida)
Vista de la moto con el Pirineo al fondo.
Mientras hacía la foto se me acercó un chico que llevaba una mochila.
-Buenas tardes
-Buenas, le contesté yo.
-Buena vista desde aquí, le dije.
-Si, me contestó,
-Pero desde la punta del macizo todavía hay mejor vista, me dijo.
-yo vengo de allí, por cierto conoces el Geocaching?
-No, le contesté.
-Pues el Geocaching se trata de encontrar artículos ubicados de manera estratégica en un terreno campestre, y los jugadores, utilizando su dispositivo gps deben encontrar lo que ha sido escondido en alguna parte del campo donde esté.
-Y ahora e encontrado un Llavero y he dejado otro.
-Muy interesante, le contesté.
-Pues yo vengo de una vía romana que hay bajando la Sierra de Montclús.
Le expliqué por dónde estaba, y todo decidido me dijo que iba a verlo, que hacía mucho que rondaba por estas montañas y no la había visto nunca.
Y así me despedí de este chico que me enseñó el Geocachin y yo le enseñé la Via Romana ..
Bajando el puerto por la cara Norte por una carretera desértica, estrecha, con un asfalto nuevo, pero de poca calidad, serpenteando entre los bosques de pinos.
Llegué al pueblo de Alsamora coronado por su torre de vigía árabe.
La torre tiene unos 30 metros de altura.
La leyenda dice que el moro de Moror (Moror es un pueblo cercano) estaba locamente enamorado de la señora, también mora, de Alsamora. Era tal su locura de amor que se pasaba todo el día tratando de ver desde los almenas de su castillo la mora, que estaba en lo alto de la torre de Alsamora. Como este último pueblo era en un plano mucho más bajo que Moror, y la torre no compensaba la diferencia de altura, el de Moror perdió definitivamente la cordura llamando a su enamorada que alzara más su torre: "Alsa, mora ! "," Alsa , mora!,(¡! levanta mora!!,!! levanta mora!!) se cuenta que le decía sin parar. Su voz resonante por el valle dio así nombre al pueblo de su amada.
Yo sigo mi viaje y en la lejanía encuentro más torres de vigía.
Estas torres tienen la particularidad de que siempre se ven unas con otras, por motivo de seguridad, así forman una línea imaginaria desde la que se dominan todos los pasos de las montañas.
Sigo mi ruta dirección El Pont de Montañana, por una carretera con el asfalto roto y muy retorcido que me conduce por el valle hasta llegar a pie del río.
Este es el Noguera-Ribargorçana que atraviesa el desfiladero de Mont-rebei al fondo.
De aquí a El Pont de Montañana y gas por la N-230 hasta Lleida.
Y esto es todo, espero que os guste.
: 
Daniel
