15 de agosto
Habíamos quedado con Totemsgo y Loli66 al día siguiente. Yo no los conocía personalmente, aunque sí había hablado con ellos por teléfono. Os aseguro que no me defraudaron; antes al contrario, la generosidad, la amabilidad y la simpatía con que nos regalaron en todo momento añadió mucho más al gratísimo momento que vivíamos. Una vez más, gracias a los dos.
Como digo, habíamos quedado para desayunar al ladito de la casa de Fercoba, algunos más despiertos que otros:
Al poco nos pusimos en camino. Como decía más arriba, deshicimos la carretera de la noche anterior, la N-120, aunque pronto la dejaríamos para desviarnos a la derecha. Fercoba, Totemsgo y Loli66 se sacaron de la manga una ruta preciosa, para recordar, discurriendo por carreteras estrechas para cruzarse dos motos, y flanqueadas de verde hasta donde se perdía la vista. Pasábamos siete motos por pueblos y aldeas constituidas por la arquitectura rural típica gallega, conocida por mí desde pequeñito, y que me resulta familiar y entrañable. Parecía que se respiraba mejor, en un día de sol radiante, aire fresco y temperatura muy agradable. Para completar el goce de los sentidos, el olor que se sentía era limpio, de campo. Y al tacto, el manillar de mi moto, dócil como siempre.
Ibamos a ver uno de los cañones del Sil, desde el mirador de Cabezoas. Mejor, unas fotos:
Un lujo para la vista. Allí nos hicimos fotos de todos con todos, en todas las combinaciones posibles, jeje, y la cosa no era para menos. Uno no está acostumbrado a ver cosas así todos los días.
Volvimos a montar para continuar de ruta, por más aldeas y lugares, a cual más encantador y pintoresco. Nos llamó la atención un semáforo en medio de un pueblo; no nos dimos cuenta hasta ese momento, pero hacía ya bastante tiempo que no veíamos ninguno.
No tengo ni idea de por dónde nos metieron nuestros guías, pero cambiamos de asfalto y cogimos una carretera mejor, camino de Celanova, donde almorzamos. ¡Cómo estaba el pulpo a feira!
¡Esta chica siempre con una sonrisa en su boca!
No teníamos tiempo que perder. Nos fuimos pronto de allí en dirección sur, por el Parque Natural de la Sierra del Xurés, limítrofe con el portugués Parque Nacional de Peneda-Gerês. Si la zona española era bonita, más lo era la portuguesa.
Foto en el paso fronterizo:
Tuvimos que pagar 1,5 € para pasar por el Parque Nacional, y merecía la pena. Bosques, riachuelos, curvas... pero mucho tráfico. Según íbamos bajando vimos un río-lago con muchas poblaciones alrededor, con gente bañándose, embarcaciones, muy veraniego todo. Era el lugar que nos decía Fercoba
aquí y en su siguiente intervención.
Al pasar la zona hicimos una paradita para tomar un café portugués, tan bueno como siempre. Ya metidos en km, fuimos a Braga. Ya era tarde, querríamos haber entrado en Valença do Miño y recorrido también parte de las Rías Bajas pero no nos era posible, por lo que decidimos cubrir la etapa por autopista hacia Vigo, Pontevedra y por fin, Vilanova de Arousa.
Fue todo un espectáculo pasar por el puente de Rande y ver las bateas mejilloneras de la Ría de Vigo, ¡qué bonito!
Allí nos esperaban Galaico y Shannen para cenar todos juntos. Ellos nos buscaron alojamiento por la zona. Como podéis ver, fuimos tratados como reyes por todos.
Aquí están, en primer plano. También os doy las gracias, vuestro trato fue de lo más agradable (Sonia, eres un encanto).
Me queda la otra parte de la mesa:
Os podéis imaginar cómo lo pasamos en medio de este ambiente: risas, charlas, más risas... Después de la cena se marcharon Galaico y Shannen en coche, y Totemsgo y Loli66 a Santiago (donde viven) en su moto, a pesar de que amenazaba lluvia. De hecho cayeron unas gotas. Hay unas fotos por ahí de ellos dos saliendo rodeados del equipo técnico, paragüeras incluidas
¿A ver, quién las pone?
16 de agosto
Lástima, a Toofastjuanito y Secreta-v se les acababan sus vacaciones, por lo que debían regresar hacia el sur. Desayunamos y poco después nos despedíamos con un abrazo y salían con caras no tan sonrientes como en estos días. Se harían de un tirón hasta Jaén, donde pretendían desquitarse de tanto tiempo sin ir de marcha. ¡Creo que lo hicieron!
Fercoba también tenía que irse. Tenía cosas que hacer por su trabajo y no pudo volver, como tenía planeado. Además, le esperaba poner en orden toda la casa, de como se la dejamos. Quedó en vernos si continuábamos ruta por Castilla y León saliéndonos al encuentro hacia la provincia de Lugo. Pero cambiaríamos de planes...
El plan de hoy estaba condicionado por el tiempo. Las predicciones meteorológicas no eran nada buenas, daban lluvia. Totemsgo y Loli66 decidieron venir en su coche y hacer la ruta del día, Rías Bajas, todos en su coche. Como estábamos vestidos para moto, nos tuvimos que cambiar. Al final casi no llovió...
Por Cambados dimos una vuelta. Yo ya lo conocía, pero no me importó para nada volver y encontrarme en esa plaza mágica:
También estuvimos en Bayona, viendo el mar.
Más adelante paramos a comer. Sabían de un lugar en el que se comía bien, y así fue. ¿Preferís la paella de pulpo con zamburiñas o la de marisco? Yo di buena cuenta de la de marisco junto con Stormbringer (¡Cinco, lo que te habría gustadoooo...!), aunque la de Loli66 y Hudsin no estaba nada mal. ¡Repetiría!
Después de almorzar fuimos al monte de Sta. Tecla, un alto desde el que se divisa, de fondo el Atlántico, y de un lado el pueblo de La Guardia:
y del otro el estuario del Miño, con Portugal al otro lado, y Caminha como principal población. Impresionante la belleza del lugar. Si podéis ir alguna vez, no os lo perdáis:
También tiene los restos de un poblado celta, muy bien reconstruido
Volvíamos atrás. Entramos en Bayona otra vez, donde vimos el Parador, antigua fortaleza. Seguimos por la costa disfrutando con el paisaje, y sobre todo porque no conducíamos, viendo la ría de Vigo, la de Pontevedra y la de Arosa. Paramos en Combarro para dar una vuelta, ver el pueblo y tomar un café. Preciosa la imagen de los pies de los hórreos al borde del mar.
Marín, al otro lado de la ría:
Seguimos ruta por la costa por Sanxenxo y Portonovo, hasta llegar nuevamente al hotel, donde teníamos las motos, ya atardeciendo.
Nos cambiamos y me despedí de Totemsgo y Loli66. No me gustan las despedidas...
Montamos en las motos; yo ya la echaba de menos después de un día sin andar. ¡Qué bien, en mi moto otra vez!
Desde este punto teníamos planes diferentes. Stormbringer y Hudsin irían con Totemsgo y Loli66 a Santiago, donde se quedaron esa noche, y yo les seguí por la autopista hacia La Coruña, donde estaba mi familia, mi hermano, cuñada y sobrinas. Como sabéis, tenía planeado estar con ellos, si bien más tiempo del que al final estuve, sólo un día y medio, porque el 18 por la tarde había quedado en reunirme con los dos en Ribadeo (costa norte de Lugo, límite con Asturias), para continuar este viaje. Ya habíamos decidido seguir rumbo Este por la cornisa cantábrica, y no por Castilla y León. Así se lo dijimos por tanto a Fercoba por teléfono, ya que estaba esperando nuestra respuesta; como véis, no quería perder ni una oportunidad; es un poco como dije de Secreta-v pero, a diferencia de él, no puede estar serio...
Mi hermano aceptó a regañadientes que estuviera tan poquito con ellos, dada la distancia que nos separa, pero comprendió que eran mis vacaciones y que mi equipo estaba esperándome. Fue, aún así, un día y medio muy intenso y bien aprovechado, sin parar en casa más que para dormir. Me vino muy bien en cuanto a la intendencia, ya que lavé todo lo lavable, incluso los pantalones de moto, que casi se negaban por la fuerza a entrar en la lavadora.
En este tiempo, Hudsin y Stombringer recorrieron Santiago y el resto de la costa de Pontevedra y La Coruña, Rías Altas. Pero eso ya lo contarán ellos.
18 de agosto
El tiempo nos acompañaba, afortunadamente. En estos últimos días estuvo basante nuboso, aunque en ningún momento descargó la lluvia que todos temíamos, normal en el norte de España.
Eran las siete de la tarde cuando llegué al punto de reunión. Mejor dicho, llegué tres veces, porque me pasé del sitio dos. Afortunadamente, voy comunicado por teléfono con el Midland en el casco, lo que evitó que me pasara de largo tanto que hiciera el resto del viaje solo
Al momento de llegar yo apareció otra V-Strom montada por Motero VStrom. "Qué nick tan vulgar", diréis. Pues no, oye, tiene su punto: Manuel Otero, Motero VStrom para el foro.
La cosa fue así, contada por Hudsin en su blog:
hudsin escribió: Hola, me has llamada ¿quien eres?-
- ¿Me he cruzado contigo con la moto?-
- La verdad, es que me he cruzado con mucha gente-
- Me ha dado tu telefono Totemsgo ¿Tu eres uno de los del Quizas?-
- Pues si -
- Estoy aqui cerca de vosotros, ¿que os parece si nos vemos y hacermos un cafe?-
- Perfecto, estamos en el bar de la rotondo donde se ajuntas las dos nacionales-
- Fantastico, en 20 minutillos estoy alli, por cierto, soy MoteroVStrom -
- Perfecto, pues nos vemos ahora -
¡Las cosas que pasan!
Tomamos un cafelito en la cafetería donde quedamos:
Motero, gracias por acudir, tuve mucho gusto en saludarte.
Era tarde, más de las siete y media. Planeamos andar un poco camino adelante hasta donde llegáramos. Hasta ahora íbamos encontrando sitio por donde necesitábamos sin mayores problemas, y es la opción que te da más libertad de movimientos y, sobre todo, sin la prisa de tener que ir a un sitio concreto donde ir y a una hora concreta. Libertad, sensación amplificada por el hecho de ir en moto, con tu cuerpo al aire, sintiéndote dueño de la situación. Ya sé que no os descubro nada nuevo a ninguno de vosotros... Tenemos que felicitarnos, somos unos privilegiados.
Yo conocía Luarca, así que hice una parada y les sugerí entrar en este bonito pueblo de la costa asturiana. Y eso hicimos, asi que me desvié de la N-634. Entramos en el centro; estaba en fiestas, lo que nos ocasionó algún que otro desvío inesperado. Suerte que mi GPS estaba al quite, llevándonos por las calles más estrechas y empinadas que encontró; hasta hubo que maniobrar en parado para doblar una esquina, y en cuesta, imaginad.
Por fin, llegamos al puerto:
Lo que también iba buscando era un mirador desde el que se ve el pueblo, para no perdérselo:
Y poco más que contar de este día. A la salida de Luarca, ya casi de noche, encontramos un hotel, donde nos quedamos a dormir y cenar. Ni nos cambiamos para la cena, sólo subimos lo necesario. Stormbringer se acostó pronto, y yo preferí quedarme sentado al fresco de una noche estupenda en una terraza en el exterior del hotel. Hudsin se lo pensó, aunque poco, y me acompañó; estuvimos sentados charlando un buen rato.
19 de agosto
Ese día salimos tempranito. A los pocos kilómetros de salir, y al igual que la tarde anterior, les expliqué que Cudillero era otro pueblo para conocer, con un bonito puerto pesquero. Así que hicimos la misma jugada:
Nos adentrábamos en Asturias. Stormbringer estuvo hablando por teléfono con Jinete Nocturno, que precisamente andaba ese día por la zona de Picos de Europa con Spauser y Bibo, un antiguo miembro de este foro, dando una vuelta como nosotros, pero por otra ruta. Dicho y hecho, quedamos con ellos a las 11, para desayunar, entre Cangas de Onís y Covadonga. De lo acostumbrados que estamos a los teléfonos móviles ya no les damos importancia, pero ¡qué bueno es estar comunicados!
Recorrimos un buen trecho por autovía, pero mi GPS no había dicho todo: por culpa de él o mía metí al grupo por Gijón, "por tó er medio", con las consiguientes protestas. ¿Y lo guapas que son las "Jijonencas"? (no vimos ni una, quillo).
Pero fuimos puntuales a la cita:
Fue una alegría para mí volver a ver a Spauser (primero por la izquierda) y a Jinete (tercero en la foto), con quien nos dimos fuertes abrazos y muy sonados a la espalda, y celebré conocer a Bibo (segundo por la izquierda en la foto).
Después de un rato nos despediríamos, tres hacia el oeste y tres hacia el sur.
Aquí ya entra en juego Patri. Mantuve conversaciones con él desde que estábamos en Lago de Sanabria, a donde ya quiso acudir a nuestro encuentro. El cambio de planes que supuso el retraso por el necesario cambio de cadena de la moto de Stormbringer lo impidió, pero él no dio nada por perdido, así que si no atacaba por el flanco sur, lo haría por el norte. Hablamos por teléfono y quedamos en Panes (o eso creí entender a la vista de lo que después ocurrió). En nuestra conversación hablamos de que nos podría llevar a almorzar por sitios que conocía, pero que Panes no lo conocía demasiado en cuanto a sitios para comer.
Recorrimos la AS-114 hacia el oeste, deteniéndonos en cualquier lugar que fuera posible, para contemplar la grandeza de las montañas y lo pequeño de una carretera encajonada en un desfiladero, la aspereza de la roca y la suavidad del verde asturiano.
Iniciábamos la ruta del Cares, aunque sólo llegaríamos hasta Carmarmeña desviándonos en Poncebos hacia Cabrales. Muchísimos coches aparcados de senderistas y excursionistas que casi colapsaban la carretera
Y el río Cares:
Para llegar a Camarmeña nos tuvimos que encaramar por una carretera que era de 1ª y 2ª marchas, con un desnivel impresionante y sin protecciones al exterior. Llegamos a la localidad, y eran unas pocas casas. Luego he encontrado la información de que tiene 25 habitantes. Sólo decir que en la "calle" de entrada habían dos coches, y casi no cupieron nuestras tres motos.
¡Qué lugar! Lástima que el día estuviera nuboso, teníamos el Naranjo de Bulnes al alcance de la mano en uno de los miradores situados justo enfrente:
Era ya la una y media de la tarde, y debíamos acudir al encuentro con Patri. Según una última conversación, se dirigía desde Gigón hacia ¡Potes! No sé muy bien de quién fue la confusión, pero lo cierto es que el pobre Patri tuvo que desandar camino hacia Panes. ¡Gracias, Patri!
Seguimos por una carretera disfrutando del paisaje, aunque sin prisas. Sobre las 14,30 llegamos a Panes. Aparcamos las motos e hicimos tiempo con un entretenimiento tonto, una cerveza y unos choricitos a la sidra, sentados en una terracita en la calle. Casi a las tres llegaba nuestro perseguidor. Nos presentamos, un abrazo y se sentó con nosotros a charlar un rato.
Patri es un tio muy peculiar. O eso me pareció a mí, jeje. Habla un poco atropelladamente, con un acento astur muy marcado (a veces no entendía lo que decía), pero creo que tiene un carácter más duro que
las putes piedres. ¡Hasta que no nos vio no paró, el tio!
Aunque no eran sus dominios (es más de la zona oeste, la de la sidra), fuimos a comer a un sitio cercano. Vimos la carta y empezamos con cuidado: fabada asturiana. Y para Patri, también, a pesar de que no tenía hambre porque ya había comido algo en su casa, gazpacho (!!) que él mismo hace.
Como véis, todo un personaje...
Y a todo esto, Stormbringer ya había hablado con Luipy, a quien veríamos muy poco después.
Así vamos enlazando con el Comando Norte, y de esta manera vamos desgranando este "cuaderno de a bordo", este diario. Casi sin darnos cuenta un día estábamos con la gente del Centro, el Comando G, otro con los cántabros, luego vendría el Cat... Los días pasan, los kilómetros bajo nuestras ruedas y pasan las personas, pero sólo quedan (quedamos) ahí, dispuestos a compartir momentos, risas, charlas y a ofrecer lo poco o mucho que sepan o puedan.
El punto de reunión, al que acudiría también Jesusca, era Unquera, donde se dividen los territorios asturiano y cántabro. Patri nos acompañó para encontrarnos todos:
Qué os voy a decir yo de un encuentro entre amigos. En nuestro foro somos, la mayoría, de esa clase de amigos que están separados por mucha distancia, pero que se ven con la misma frecuencia que muchísimos amigos que viven en la calle de al lado. Y es que el condicionante de la lejanía nos da un plus de alegría cuando un encuentro se produce, porque supone un esfuerzo el acudir a un encuentro; así que cuando después de 500 ó 1.000 km alguien te dice "me alegro de verte"... necesariamente te lo crees porque necesariamente es cierto.
Poco después, Patri se volvería hacia atrás, hacia Gijón. ¡Nos veremos más veces, Patri!
Nuevamente en camino. Como a 10 km está S. Vicente de la Barquera. Había marea alta, asi que parecía que el mar continuaba tierra adentro:
Paramos a tomar café un poco más adelante, en Comillas, a la vista de una playa que no invitaba al baño, y es que el día estaba sólo regular. Tuvimos todo el día el cielo encapotado, y desde este momento más amenazaba la lluvia, como así ocurrió, aunque sólo mojó un poco las motos y las botas.
Las olas batían con fuerza en las rocas, al fondo:
En todo este recorrido íbamos bordeando la costa, playas de arena blanca a la izquierda, espacios verdes a la derecha. Pasado Santillana del Mar nos incorporamos a la A-67, dirección Santander. Mucho tráfico y atascos; ya no me acordaba...
Pero no nos metimos en Santander. Luipy nos llevó a un alto, al mirador de Peña Cabarga, donde hay instalado un repetidor. Está a 551 m de altitud, sobre Santander a un lado, y Pedreña y Somo al otro. Según íbamos subiendo nos íbamos metiendo en la capa de nubes que cubría toda la zona.
Después del viaje de lugares y paisajes que llevábamos, ya casi no nos causó impresión... Os pongo unas fotos sólo por aburrimiento:
¡Precioso! Fue una verdadera pena que estuviéramos entre las nubes porque no había gran visibilidad. Pero entre claro y claro se divisaba los pueblos de la zona. No voy a decir que llovía porque estábamos metidos en el agua: todo el aire era agua, se tocaba, te mojaba las manos y la cara, pero para mí fue una sensación placentera; aunque posiblemente fuera debido al momento, el lugar, la compañía...
Comenzamos la bajada. Con el suelo mojado aumentábamos la cautela; aunque pensándolo bien, íbamos sin prisas: estábamos de vacaciones (Hudsin dixit).
Me alegré de ver a Jesusca, a quien había sólo saludado en la II Hispano-Lusa y con el que crucé hace ya algún tiempo varios mensajes privados sobre la materia que todos sabemos que domina, y cuando le pedí ayuda. Y no sólo conmigo lo ha hecho, como todos sabemos. En la mayoría de casos te quedas con las ganas de entablar conversación en una de estas reuniones multitudinarias, Kdds nacionales o de menor nivel, pero es tal el ritmo que se lleva que es imposible, claro; asi que llegas a conocer mejor a las personas (aunque a veces menos de lo que se quisiera) a nivel foro en detalles, rasgos, líneas seguidas por las personas... y alguna que otra característica que te sorprende en un momento dado. Toofastjuanito decía hace poco, en una carta abierta muy bonita (podéis verla
aquí, recomiendo su lectura), que "todos somos ejemplares unicos, un milagro natural..." Y es completamente cierto, se trata de la combinación de x elementos como ingredientes de una personalidad. Pero lo mejor de todo es que los que participamos de ese "ingrediente" común pasamos el filtro de este foro y aquí nos quedamos, el que no lo tiene o no quiere pasa de largo, y entre el enorme núcleo de este foro la "química" hace el resto.
Sigo.
Luipy nos ofreció su casa para dormir esa noche; y para que durmieran las motos, su garaje. En un rato subimos maletas y trastos, nos aseamos un poco, nos cambiamos y salimos sobre las nueve y media, ya casi de la noche. Salimos hasta la playa.
Cogí un jersey finito. No me haría falta, se estaba de maravilla, y para nada echaba de menos los 35º ó 40º de Sevilla. Y ahora que lo pienso, con razón están más pobladas las zonas frías de la Tierra... ¡porque el calor de Sevilla no hay quien lo aguante! A veces me dice gente de otros sitios que en Sevilla estamos acostumbrados, y contesto que no, que aquí lo que estamos es resignados, porque a esto no se acostumbra nadie. Bueno, no divaguemos...
Jesusca tenía que irse, trabajaba al día siguiente y tenía que volver a casa, de modo que nos despedimos. Luipy se quedó con nosotros, así que subimos los cuatro a su coche y nos fuimos a cenar.
Apenas conocía a Luipy, sólo de un apretón de manos en la ruta de nuestra VII Concentración Nacional del Club en Puerto Real (Cádiz), y apenas una breve charla. Lo conozco más por aquí dentro, por el foro. Y no necesito saber mucho más de él para comprender lo que salta a la vista... Luipy, muchísimas gracias por tu hospitalidad. Me quedé con las ganas de conocer a Idoia.
Y gracias por las sardinas de la cena... ¡cómo estaban! Y las anchoas, y los mejillones, y...
No recuerdo momentos desagradables en todo mi viaje, todos fueron muy gratos: con unas personas, con otras... todo el mundo se ha volcado con esta iniciativa, y sé que muchos se han quedado con las ganas. Es para repetir... lo irrepetible. Un auténtico lujo.
La charla continuó en una cafetería cerca de la casa de Luipy. Un cafelito, un ratito más, y nos fuimos a dormir.