Volvía de una ruta por la montaña y me aparté a una aldea para tomar un bocao, me paré y comprobé que, en breve le daría el sol, por lo que me subí otra vez y bajé el bordillo para dar la vuelta en una calle estrecha. Estaba girando y cometí el error de no acelerar y soltar más embrague, por lo que se me tumbó demasiado y no pude más que evitar que golpera fuerte, por lo que la aguanté mientras pude y salté por razones obvias. Me cabreé tanto conmigo, que la levanté. Me costó pero la levanté. Daños: pues alerón izquierdo (plástico, adhesivo y rayas en pintura); Defensas (oficial), rozada y maleta oficial también por lateral izquierdo; también pasta intermitente de mismo lado. Cinta aislante y palante.
Ahora mismo preguntaba un compañero por defensas, las oficiales aguantaron muy bien (perfectamente), pero no evitaron que se rallara el carenado (mal, muy mal), ya que dejé la moto casi parada.
Sabía que era cuestión de tiempo, pesa bastante y no estoy acostumbrado a manejarla (1.500 km.), y lo que es peor, volverá a pasar. Cuándo y dónde, cómo. Esa es la cuestión. Disculpas por la ecxtensión, pero he creído que se pueden sacar positivas conclusiones. Saludos y hasta la proxima.