Tras muchos viajes a Marruecos en Semana Santa, desde hace unos años también visitamos el país alauita en otoño. Esta es la crónica del realizado del 6 al 15 de octubre de 2023.

En esta ocasión la expedición estaba formada por 11 personas divididas en dos grupos diferenciados por el medio de transporte utilizado, uno haría el viaje íntegramente en moto siendo Algeciras la ciudad de inicio y fin y otro en un vehículo todoterreno alquilado en Marruecos (por causas personales de una de las integrantes) siendo en este caso el aeropuerto de Tánger principio y fin del viaje. Además del mencionado todoterreno, un Hyundai Tucson, participaban un total de 5 motos, una V-Strom DL650, una Yamaha Tracer 9, una BMW R1200GS, una KTM 1290 Superadventure S y una BMW R1250GS Adventure.
Viernes 6 de octubre
Inicialmente el grupo debía encontrarse en la zona de embarque a Tánger MED (Balearia) del puerto de Algeciras sobre las 18:30 horas pero la posibilidad de embarcar en el ferry de las 16:00 horas hizo adelantar el horario considerablemente.
Finalmente llegamos todos a tiempo y tras realizar el embarque iniciamos el viaje poniendo rumbo a Marruecos.




Durante la travesía aprovechamos para que nos sellaran el pasaporte para ahorrarnos ese trámite en la frontera y una vez desembarcamos en Tánger MED realizamos los trámites del paso fronterizo e inmediatamente después iniciamos la etapa hasta llegar a la población de Ghedir Eddefla con un recorrido de apenas 30 minutos.
Allí nos pusimos cómodos, cenamos y charlamos un rato para comentar lo que debía ser la ruta del día siguiente, para finalmente irnos a disfrutar de un merecido descanso.



Sábado 7 de octubre
El primer tramo del día nos llevó hasta la ciudad de Chauen (Chefchaouen) donde paramos para visitar sus zonas más emblemáticas impregnadas de colores azules y blancos, admirar sus pintorescos rincones y hacernos la primera foto de grupo.





Tras la visita seguimos hacia el sur atravesando la región de Ouezzane y paramos a comer en Le Boucherie de la Gare, junto a la N13. Cuando terminamos volvimos a la carretera para finalmente llegar a las ruinas romanas de Voloubilis (Patrimonio de la Humanidad de Unesco desde 1997). Esta antigua ciudad romana está situada al pie del monte Zerhun y ocupa 40 hectáreas de terreno.






Acabamos el día en la población de Moulay Idriss (la ciudad santa de Marruecos) y aprovechamos la buena temperatura para dar un paseo nocturno, recorrer el mercado y cenar en el centro.



Domingo 8 de octubre
Después de desayunar pusimos rumbo a la populosa ciudad de Meknés, que atravesamos sin demasiados problemas debido a que todavía era bastante temprano. A la hora y media de camino paramos en uno de los muchos vendedores ambulantes de café “plantados” junto a la carretera con su vieja furgoneta en la que llevan incorporada una máquina de café exprés y todos los utensilios necesarios para su venta y degustación. Café, risas y fotos fueron los tres ingredientes en todas y cada una de estas paradas.



Seguimos avanzando hasta entrar ya en zona del Atlas realizando una nueva parada en el conocido Bosque de Cedros (Bosque del cedro Gouraud, Azrou). Lo que antes era una zona prácticamente virgen ahora está llena puestos de comida, mesas, sillas y un sinfín de accesorios. Allí estuvimos un buen rato, estiramos las piernas, vimos muchísimos monos en libertad y nos hicimos cantidad de fotos.




Seguimos recorriendo el Atlas dirección Jenifra parando en la entrada de esa ciudad para comer el restaurante El Borj, que a la postre fue el más caro de todo el viaje.



La siguiente parada, tras recorrer decenas de kilómetros de un asfalto en perfecto estado en el que disfrutamos de la moto al máximo, fue en el Col Tizi Tanoute Oufilal a 2.070 metros de altura.


Desde allí pusimos rumbo a Zaida, también por una carretera en perfecto estado, dando por finalizada la etapa del día en esa ciudad.





Lunes 9 de octubre
Finalizado el desayuno y de nuevo en las motos hicimos una primera parada para repostar y de inmediato pusimos rumbo al desierto siguiendo la transitada N13 con una primera parada en el túnel de Foum Zabel, también conocido como “túnel del legionaro” ya que fue excavado por parte de la Legión Extranjera desde julio de 1927 hasta marzo de 1928.




Sin dejar la N13 fuimos avanzando hasta llegar al impresionante e inacabable palmeral del valle del Ziz.



Dejamos atrás este inmenso vergel de palmeras y enfilamos hacia Merzouga, hacia el desierto, llegando a destino hacia mediodía. En el establecimiento donde nos íbamos a alojar ya nos estaba esperando nuestro anfitrión Alí con un delicioso té.




Después de comer y ponernos ropa cómoda salimos a visitar la zona con un recorrido en el que no faltó una parada en La Khamilia con sus músicos.





Parada en La Gran Duna.

Cuando empezó a anochecer fuimos a dar una vuelta por la calle principal de Merzouga para visitar sus tiendas de ropa, cacharrería varia, especias y demás productos típicos.





Acabamos el día cenando y probándonos infinidad de pañuelos a modo de turbante.







Martes 10 de octubre
Tras un copioso desayuno nos dispusimos a pasar un día de “descanso motero” ya que el plan era irnos en vehículos 4x4 para afrontar una seríe de visitas que ya teníamso programadas. Con tres guías locales iniciamos un recorrido que tendría de todo: asfalto, pistas, arena, piedras y desierto.


En primer lugar fuimos hasta la Llanura de Martha, en esa zona y en tres emplazamientos distintos aunque cerca el uno del otro vimos las tres creaciones del arquitecto alemán Hannsjönrg Voth: espiral aurea, ciudad de Orión y escalera celeste.
Antaño se podía visitar su interior pero actualmente no está permitido a fin de preservar su integridad, salvo que pagues un precio de entrada que nos pareció excesivo ya que sólo daba acceso a la zona exterior.
Ciudad de Orión.

Espiral Aúrea.

Escalera Celeste.

Y como no, aprovechamos para inmortalizar nuestra estancia por allí.




También fue la zona elegida para hacernos una foto de grupo más.

Desde la Llanura de Martha nos desplazamos hasta la ciudad de Erfoud donde comimos y donde posteriormente dedicamos un buen rato a ir “de tiendas” por el mercado y establecimientos de alrededor.



Sobre las cuatro de la tarde iniciamos el regreso a Merzouga donde llegamos una hora más tarde aproximadamente. En menos de media hora ya estábamos de nuevo en disposición de iniciar la marcha, otra vez en vehículos 4x4, pero en esta ocasión con un destino bien diferente: el campamento de jaimas donde íbamos a pasar la noche, entre las dunas de Erg Chebbi.




Tras acomodarnos en nuestras jaimas y cambiarnos de ropa nos dispusimos a disfrutar de la puesta de sol.




Después de eso nos ofrecieron una buena y copiosa cena a base de platos típicos de la zona y finalmente nos deleitaron con música tribal, habiendo quien incluso se atrevió a “danzar” alrededor de la hoguera o tocar algún que otro instrumento.




Miércoles 11 de octubre
Y si espectacular había sido la puesta de sol del día anterior, no menos espectacular fue el amanecer que daba inicio a esta jornada.


Nos llevaron hasta las motos en 4x4, nos vestimos adecuadamente y tras despedirnos de Alí iniciamos la etapa del día. Pasada apenas una hora y media ya habíamos llegado a El Jorf donde paramos para visitar los antiguos pozos, ya secos, pero que hace algunas décadas llevaban agua hasta la población.




Retomamos la marcha hasta llegar a nuestra siguiente parada, Tinerhir. Desde uno de sus miradores pudimos ver la ciudad y el enorme palmeral que la rodea.




Seguimos adelante y en apenas media hora paramos de nuevo, en esta ocasión para admirar las impresionantes Gorges du Todra.



Aprovechamos para contemplar y fotografiar la zona, comprar algún souvenir y sin alargar la parada más de lo necesario continuamos por la serpenteante R703/N12 hasta alcanzar la nueva presa de Toudgha Dam. A partir de ese punto la vía mejoró considerablemente y pudimos disfrutar de amplias curvas y buen asfalto durante bastantes kilómetros. De nuevo en el Alto Atlas.
La siguiente parada ya fue en el Auberge Hotel Restaurant Panorama Ait Hani, lugar donde descansamos unos minutos y probamos un café “de pucherete” que nos ofreció el responsable del lugar.




Tras esta parada enfilamos hacia nuestro destino, disfrutando nuevamente de buenas curvas hasta coronar el paso del Tizi’n Tirhourhizine (2.431 metros de altura) para finalmente llegar a Agoudal.
Allí tuvimos tiempo de visitar la población y charlar con los lugareños. Acabamos degustando una sabrosa cena, tomando un té de hierbas de la zona y charlando de mil temas con uno de los dueños del hotel.







Jueves 12 de octubre
Otra jornada en la que seguímos en la zona del Atlas para disfrutar (o sufrir, según se mire) los 135 kilómetros que recorre la carretera R706 entre la población de Almgho y la nacional N13. Apenas inicado ese tramo ya topamos con el Tizi n’Ilaiane, un paso situado a 2.300 mts. de altura. Continuamos por Tirhibout, Igli, Oü Aissa, Taguendoust y Tamagourt con un asfalto roto, tramos de tierra, páramos llanos o montañosos a derecha e izquierda, precipicios y un sinfín de “variaciones” en el terreno que aún dificultando nuestro avance eran un regalo para la vista.








Al final alcanzamos la populosa ciudad de Er-Rich, en cuya entrada nos encontramos con uno más de los muchos controles de policía que vimos durante nuestra estancia en Marruecos.



Saliendo de la ciudad accedimos a la N13 y tras poco más de 60 kilómetros cogimos la N15. A partir de ahí nos esperaban casi 100 kilómetros de muy buena carretera entre llanuras, desierto de piedra y pequeños valles totalmente secos. Sin duda un magnífico recorrido para disfrutar sobre la moto.
Paramos a comer en la entrada de Missour y enseguida apreciamos un cambio radical de paisaje con muchos olivares, habida cuenta que ya estábamos en zona de producción olivarera.



A media tarde llegamos a nuestro destino, un énclave que tiempo atrás seguramente fue una especie de resort de alto nivel, pero que en la actualidad ya conservaba bien poco de todo aquello.



Tras ducharnos y cambiarnos de ropa ya que el día había sido uno de los más calurosos, solicitamos un servicio de taxis para que nos trasladaran hasta la ciudad y así poder pasear por sus calles.


Viernes 13 de octubre
Partimos de Missour despues de desayunar y tomamos dirección norte para dirigirnos hacia la ciudad de Guercif, situada a unos 175 kilómetros. Durante casi todo el trayecto continuamos entre bosques de olivos situados a lo largo y ancho del terreno.


Pasamos Guercif y nos adentramos en uno de los tramos de carretera más espectaculares de esta zona, la N2 hasta prácticamente llegar a a Alhucemas. Carretera impecable, con dos carriles por sentido, amplias curvas y magnífico asfalto. Disfritar no … lo siguiente !!.
En una etapa sin mucha más historia que haber disfruta mucho, muchísimo de la carretera, llegamos a nuestro destino que no era otro que el Resort emplazado en una de las mejores playas de la ciudad.




Por la noche salimos a dar una vuelta, ver tiendas y disfrutar de una cena a base de pescado fresco en uno de los establecimientos más conocidos de Alhucemas que además tenía unas vistas espectaculares del lugar donde nos alojábamos.



Ya de regreso algunos se quedaron a tomar una copa en la discoteca del resort y es que las vistas y el ambiente invitaban a ello.


Sábado 14 de octubre
Había quedado pendiente el día anterior y por lo tanto fue lo primero que hicimos, ir a ver el archipiélago de las islas Alhucemas formado por tres islotes de nombres Isla de Tierra, Isla de Mar y Peñón de Alhucemas. Este último presentaba una imagen distinta a la habitual hasta entonces ya que el Ministerio de Defensa español había ordenado derribar la Torre del Reloj debido al mal estado de conservación en que se encontraba.



Tras una breve parada iniciamos la etapa del día, última en tierras marroquís en este viaje, por la N16. Algo alejada de la costa en su tramo inicial, pero serpenteando junto al mar partir de la localidad de El Jebha hasta llegar a Tetouan.
Si en días anteriores habíamos disfrutado, la N16 no se quedó atrás y nos deparó un impresionante recorrido para disfrutar de la moto.






Alcanzamos Tetouan casi a mediodía y desde allí encaramos el último tramo hasta el puerto de Tánger MED pasando por la P4701, con unos kilómetros finales que no dejaron indiferente a nadie en un magnífico trazado junto a la presa “Barrage Hassan Ben El Mahdi”.


En la zona exterior del puerto, antes del paso de la frontera, nos despedimos de quienes continuaban su viaje en avión y nos dispusimos a realizar los tramites de embarque, aduana, etc …

El ferry salió sin ningún retraso y llegó a Algeciras a la hora prevista.


Tras desembarcar fuimos a cenar a un restaurante que nos habían recomendado y acabamos brindando por nosotros y por el viaje.



Mientras, en el aeropuerto de Tánger el grupo “aerotransportado” esperaba la hora de embarque y la salida de su avión.

Y como colofón, quienes estábamos en Algeciras tomábamos una última copa en un local de la ciudad.

Domingo 15 de octubre
Hacía horas que el viaje había llegado a su fin y ya sólo faltaba regresar a casa. Atrás quedaban unos días repletos de vivencias, anécdotas e historias. Seguramente para unos fue un viaje genial, para otros no tanto y para otros incluso intrascendente. Pero siempre y en todo caso, irrepetible.
Como punto final a esta crónica nada mejor que mencionar a todos los integrantes que formaron el grupo: Jesús, Rosa, Baldo, Mabel, Romeu, Jordina, Marta, Kiko, Mónica y mi querida Susi.
Gracias a todos … “ Gente así, sólo aquí ”