
Aquí con la moto de prueba, con la que hice unos 300 kms.
Después de unos años en los que Suzuki ya no comercializaba la Vstrom 1000 por temas de contaminación, por fin ha llegado el nuevo modelo para competir en el mercado de las maxi-trial, aunque no directamente en prestaciones (cubicaje, potencia, electrónica), pero si en practicidad y con un precio bastante competitivo.
Las novedades más destacadas de este modelo son, sin duda un chasis doble viga y basculante en aluminio, embrague anti rebote con mando hidráulico, una horquilla invertida Kayaba con ajuste de precarga, extensión y compresión, frenos de anclaje radial y pinzas Tokiko mono bloque de 4 pistones, control de tracción de dos posiciones más desconexión y sistema de frenos ABS, además de un motor de 1036 CC. en V a 90 grados, totalmente remodelado respecto del antiguo de 996 CC. que da 100 caballos y un par motor de 102 Nm a 4000 r.p.m.
El panel de instrumentos ofrece toda la información necesaria (temperatura, hora, ordenador con consumo medio e instantáneo, termómetro con aviso de hielo (por debajo de 3 grados), temperatura del agua del radiador, nivel de combustible, dos totalizadores parciales, etc. etc.). Al principio cuesta ver tanta información digital, pero como todo, es cuestión de acostumbrarse. El Control de tracción se opera desde la piña de mando izquierda y la luz larga de carretera desde la parte de delante de la misma piña de mando.


La mia, en rojo y con solo 27 kms.
La ergonomía del modelo, en general se puede considerar buena. La primera sensación es de moto muy alta, pero con una buena posición de conducción natural y cómoda que en principio debe permitir hacer viajes largos sin fatigarse demasiado.
Mi compañera me comenta que la zona del pasajero, es cómoda y amplia y las asas de aluminio pueden asirse de una forma natural. El único inconveniente menor que ve, es la altura al subirse a la moto. Cabe decir que por ciudad como todos los modelos de este sector, se puede utilizar más o menos bien, pero con más inconvenientes que ventajas (consumo, altura, radio de giro, etc.).
Es una moto, que pese su tamaño general pesa solo 228 kg en orden de marcha, lo que permite moverla en parado con cierta facilidad.
Con su ancho manillar, en carreteras reviradas se mueve muy bien y con agilidad y en tramos de autopista / autovía, inclusive a velocidades altas se muestra aplomada, estable y segura.
El motor responde con contundencia desde marchas bajas, ya que el par máximo (102 Nm) se obtiene sólo a 4000 vueltas. La aceleración, acostumbrado a los cuatro cilindros, es un poco lenta, pero suficiente, desde cualquier marcha.
La iluminación de cruce/carretera es más que buena y detrás monta un piloto con leds que según me comentan ofrece muy buena visibilidad.
Debo decir que no he probado las características de la moto por pistas de tierra, ya que nunca he salido del asfalto, pero de entrada ésta claro que en general todas estas motos son más bien para carretera que para off-road.
Respecto de la pantalla, un 10 por Suzuki con el sistema de inclinación que se mueve directamente sin herramientas con una sola mano (la altura se regula con una llave Allen), pero la verdad es que no costaba nada ponerle una de más grande (187 € cuesta la original más amplia y más alta) que cubra los brazos y la cabeza, ya que si no tendremos algunas turbulencias en éstas zonas.
Con dos discos de 310 delante con pinzas de cuatro pistones y uno trasero de 260 los frenos funcionan con mucha contundencia y eficacia. Todavía no he tenido ocasión de probar el ABS fabricado por Bosch, pero si funciona como el de otros modelos de la marca no tendremos ningún problema en parar la moto en circunstancias adversas, eso sí siempre con la moto recta.
Detrás monta un sistema progresivo con bieletas con un pomo muy accesible para regular la precarga y cuenta con regulación de la extensión. Delante monta una Kayaba invertida con regulación de precarga, extensión y compresión. La suspensión delantera, dado su largo recorrido (160 mm) se hunde bastante en frenadas fuertes, pero funciona perfectamente absorbiendo las irregularidades del terreno. En principio he encontrado que el ajuste por defecto que trae de fábrica es bastante acertado.
Referente al consumo, según el ordenador y en recorridos mixtos de unos 500 km ha salido una media de 5,5 litros / 100 km circulando a velocidades legales. Un consumo más que aceptable para una 1000 de 100 caballos.
El ruido del motor es el típico de un mono cilíndrico pero con un silbato sostenido y el aparatoso y voluminoso silenciador hace su trabajo perfectamente
Ahora que la moto ya casi tiene 1.800 km, pero aún no se ha terminado el rodaje (hasta los 1800 km, según el manual) el motor se nota más elástico y sube de vueltas más alegre. Las revisiones son cada 12.000 km como en todas las motos de nueva generación.
Los peros que le encuentro, son la falta de caballete central y más teniendo en cuenta que la transmisión es por cadena y la falta de cubremanetas en una moto de este tipo. También se podía haber mejorado la posición de los estribos delanteros, ya que al poner el pie en el suelo la parte interior de la pierna toca con la punta del estribo y hay que retrasar un poco la posición del pie.
Referente a la estética lo que encuentro realmente feo es la curva del tubo de escape del cilindro delantero y la posición del filtro de aceite. Se hace necesario ponerle una quilla para mejorar el aspecto estético.
Suzuki nos ofrece baúl, maletas laterales y una multitud de accesorios a unos precios bastante disparados. Habrá que esperar a que marcas como Givi o Sw-Motech empiecen a sacar accesorios (ya tienen unos cuantos) a un precio más competitivo.
La conclusión es que estamos ante una máquina, equilibrada, bien pensada y que no pretende luchar cuerpo a cuerpo ni en potencia, prestaciones o electrónica con los referentes del sector del maxi-trail. Y es que esta moto está pensada para la utilización normal que hará de ella el 95% de los posibles usuarios y le sienta perfectamente aquella frase que dice "todo lo hace bien, pero sin destacar en nada concreto."