Ante todo quería presentar mis disculpas por haber tardado tanto en editar esta tercera parte. Obligaciones laborales y falta de tiempo, han impedido sentarme delante del ordenador a redactar esta tercera parte....aunque, como dice el refrán, “...mas vale tarde que nunca....”.
El martes 4 de Junio nos lanzamos a la carretera. Nuestro objetivo era llegar a la península de Troia en Portugal, justo al sur de la localidad lusa de Setúbal. A pesar de que tenía todo programado en el GPS, la ruta fue un sonoro fracaso por dos motivos; uno, el reiterado dolor de estómago, secuela de una úlcera unas semanas antes del viaje; dos: varias equivocaciones mías, que a pesar de seguir la ruta trazada por el sistema de navegación, metí la pata a la hora de incorporarme en varias intersecciones....todo eso, unido a el nefasto sistema de señalización lusitano y al hecho de que incomprensiblemente, algunas de las localidades por las que pasamos no tenían carril de incorporación a ciertas autovías. Un completo desastre, vamos. Tomamos unas cuantas fotos, pero creo que ni merece la pena mostrarlas. Eso si, aprovechamos el paso por Badajoz capital, para visitar a algunos familiares que tiene Toñy en esta urbe. Por la tarde nos dedicamos a visitar algunos de los rincones de la localidad que estaba siendo nuestro hogar durante nuestra semana de vacaciones: Montijo. Los primos de Toñy fueron unos excelentes acompañantes y “guías”, amén de tratarnos maravillosamente bien. Realmente nos dio mucha tristeza marcharnos de allí, pero es seguro que el año que viene volveremos.
El miércoles 5 amaneció con el cielo totalmente despejado. Con los ánimos renovados, salimos de Montijo hacia las nueve de la mañana, como sólia ser habitual en nuestras escapadas desde allí. Inmediatamente después de dejar el pueblo, tomamos la carretera EX-305 hacia La Nava de Santiago:
Nota: pinchar en la esquina superior izquierda para ver la imagen más grande....o en cualquier otra zona de la fotografía para ver la imagen a pantalla completa.
Desde La Nava, parte otra carreterita que cruza los embalses de Horno Tejero y El Boquerón.
El tiempo no podía ser mejor. El aire era fresco y puro, perfumado intensamente de aromas florales y de heno. La sensación de libertad y paz interior era indescriptible.
De nuevo nuestro entrañable amigo el toro, el guardián de las carreteras.
El ferrocarril cruza por debajo de la N-630, justo a la altura del Arroyo Villoluengo:
Embalse de Jose Maria Oriol, tambien denominado Alcantara II. Ahora lleno hasta los topes. Mas o menos en el centro de la imagen se puede apreciar un cuadro blanco; se trata de una de las viviendas abandonadas durante la inundación del embalse en su construcción. Se asienta sobre una pequeño islote.
Al mirar a nuestra derecha, vemos las obras de construcción de un puente...no sabemos si de ferrocarril o de algún ramal de la autovía. En cualquier caso es espectacular la altura que va a tener.
Este embalse es uno de los mas grandes de Europa.
La carretera prácticamente desierta, tan sólo se cruza de vez en cuando algún solitario automóvil. ¿Donde están los moteros?...también hay que comprender que es un miércoles laborable y nosotros estamos en plenas vacaciones, je, je.
El ferrocarril discurre paralelo a la carretera.
Un pequeño puente cruza otro de los pequeños ríos de la que está salpicada esta zona: Arroyo Arenero....bonito nombre.
Ruinas del puente romano de Alconétar. Una muestra más de la grandeza arquitectónica del imperio romano.
Nos estamos aproximando al fín del pantano y al cruce con la EX-109, por la cual nos desviaremos rumbo a Coria.
El puente romano, ahora visto desde la orilla opuesta del embalse.
Tramo de carretera de la EX-109. Al fondo de la foto, a la derecha, ruinas del castillo de Portezuelo.
Una lástima no poder parar a verlas, pero nos quedan muchos kilómetros por delante.
A las puertas de Coria, dos puentes cruzan el río Alagón.
Coria es la ciudad más importante del Noroeste de la provincia de Cáceres y un importante centro comercial y turístico.
Algunos kilómetros más adelante, en la localidad de Calzadilla de Coria, nos topamos con una curiosa escultura denominada “El lagarto". Constuida en bronce, representa una antigua leyenda de la localidad relacionada con un enorme lagarto, caimán o cocodrilo, que se comía el ganado y fué matado por un valiente pastor. Curiosa historia.
La carretera EX 204 es como el pasillo de entrada a Las Hurdes...
Las cordilleras montañosas se dejan ver a lo lejos. No estamos muy lejos de nuestro objetivo.
Algunas nubes, aparentemente tormentosas, parecen querer aguarnos la fiesta.
Dejamos ya la EX 204 y tomamos la SA 201, prácticamente en el límite con el territorio salmantino.
La carretera está en obras por desprendimientos, pero ello no nos impide cruzarla.
El paisaje aquí, cambia radicalmente con respecto a la provincia de Badajoz. El verde, como el ya visitado Valle del Jerte, abunda en esta región. En algunos momentos nos parecía estar rodando por el pirineo Navarro u Oscense...tal era su asombroso parecido.
Esas cajas parecen colmenas de algún apicultor de la zona...
La Sierra de la Peña de Francia en todo su esplendor.
Una paradita para descansar y comernos un bocata. Creo que pocas veces he sentido tanta paz y tranquilidad que en estas rutas moteras por la montaña.
Algunas fotillos mas del lugar....
Las nubes parecen amenazar con alguna tormenta...aunque, y como en anteriores ocasiones, nuestros temores fueron infundados, pues no cayó gota alguna, ni en aquel momento, ni el resto del día.
El ladrillar. Hermosa localidad de esta región.
Continuamos un suave ascenso....
Nuestro objetivo está cerca de alguna de esas montañas...
Riomalo de Arriba. Otra pintoresca localidad, “colgada” de la falda de la montaña.
El ascenso continúa....
Hasta llegar hasta este punto...
...a partir de aquí, el paisaje se torna aún mas espectacular si cabe...
...desde aquí se divisa gran parte de la comarca de Las Hurdes. Lamentablemente no hay tiempo en un sólo día para ver todo, por lo que tendrá que ser en otra ocasión.
Carreteras desiertas y con un asfaltado inmejorable. Rutas muy recomendables para recorrerlas sobre una moto.
Las montañas, a lo lejos, parecen invitarnos a la aventura....
Entrando de nuevo en la provincia de Salamanca, toca rodar por un tramo de asfalto en mal estado (SA-CV-106).
Toca ahora paradita para estirar las piernas y alguna fotillo como recuerdo de nuestro paso por allí.
Fuente “La Lancha”, próxima a la localidad salmantina de Monsagro.
Llegada a Monsagro.
Antigua fuente del año 1925. Restaurada en 1989. A veces, y cuando paso delante de alguna de estas antiguedades, intento imaginar cómo sería la vida en aquella época, con aún muy pocos automóviles y con unas carreteras que mas bien utilizarían los carruajes de caballos y bueyes.
Nos adentramos de lleno en el macizo de la Peña de Francia.
El asfalto está algo roto, castigado por el sol y los gélidos inviernos. Las laderas de las montañas están cubiertas de cascotes sueltos....es probable que ocurran desprendimientos con fruecuencia en esta zona.
El paisaje cobra una grandeza y una majestuosidad tal, que es imposible no parar a hacerse una foto.
….y eso es lo que hacemos ipso-facto.
La carretera sigue subiendo....
Junto antes del desvío hacia el Santuario, existe un pequeño mirador. Nosotros pasamos de largo porque lo mejor está algunos kilómetros mas arriba.
La carretera está en pésimo estado, bastante peor que el tramo que acabamos de dejar....
...pero la vista es realmente impresionante...
Nubes algodonosas forman hermosos claroscuros en la tierra...
La vista alcanza varios kilómetros desde este punto.
La carretera estaba parcialmente en obras. Probablemente debido a algún desprendimiento importante.
¡¡OBJETIVO CUMPLIDO!!....hemos llegado.
Ese edificio es un restaurante-hotel-cafetería, aunque ahora está cerrado. Una lástima, pues tiene que ser todo un placer tomarse un cafeto o un refresco en un lugar tan emblemático como este.
Enorme repetidor de telecomunicaciones, en primer plano....
El parking estaba vacío...tan sólo una pareja de turistas por allí. Cuando volvimos a bajar nos cruzamos con un autobús cargadito de jubiletas.
Trasera del Convento, también ubicado allí.
Torre del repetidor...ahora mas cerca. Desde abajo parece un cohete dispuesto a despegar....sólo falta la cuenta atrás, je, je...
El contraste de colores pardo-verdosos con el azul del cielo es realmente hermoso. Le da a uno que pensar sobre el lugar que ocupa el hombre en el Universo...
….si realmente existen en ese inmenso espacio otros mundos tan maravillosos como este “pequeño” planeta azul en el que vivimos....
Monolito situado en el centro del mirador....
Toñy posando para la foto en uno de los torreones del mirador. Al fondo la Nava de Francia.
Curiosa y original forma de identificar el paisaje que nos rodea. En el pretil del mirador están dispuestos una serie de rótulos con un punto de mira por delante. Al alinear el punto de mira con un triángulo soldado a unas varillas ancladas en la pared, se puede saber con exactitud qué nombre tiene la regíon que aparece en el horizonte.
...el que escribe estas líneas posando para la foto, junto al monolito. Homenaje-recuerdo a los Peregrinos del Camino de Santiago.
Panel informativo de la Junta de Castilla y León.
Una mirada mas al bello horizonte, antes de entrar en el monasterio....
...edificio contiguo al monasterio, el cual alberga un museo y una tienda de recuerdos....”souvenirs” como dirían los franceses. Lamentablemente hoy miércoles 5 de Junio está cerrado a cal y canto.
Capilla del Monasterio.
Miniatura de alguno de los pueblos de La Alberca situados mas abajo.
La luz solar inunda cualquier rincón. La paz y sosiego que se respira aquí es a veces dificil de hallar en otros lugares.
Primer plano de otra de las plazas del Santuario...
En una de las salas, encontramos esta inscripción...escrita en castellano antiguo, por supuesto.
Esos escudos parecen ser obsequios de otras regiones españolas. Hay incluso uno, el de la derecha, traido desde Argentina.
Hermosa obra trabajada en hierro...con un fondo espectacular.
Nos vamos. Volvemos a pasar delante de los obreros, los cuales tienen un arduo trabajo por delante...
El descenso es, si cabe, aún más espectacular...
Coronando el puerto de Los Lobos...comienza el descenso hacia la Alberca.
Descenso del puerto de “El Portillo” hacia Las Mestas, algunos kilómetros más abajo....
...una palabra resume nuestras impresiones: ES-PEC-TA-CU-LAR.
Tras pasar por la localidad de Riomalo de Abajo, cruzamos el rio Alagón.
Tomamos el camino de vuelta a casa con la promesa de visitar otras zonas de esta región el año que viene.
CONTINUARÁ....
. Las fotos son preciosas y las vistas que habeis tenido que tener, habrán sido impresionantes. Seguro que las fotos no hacen justicia al pasisaje, y si a eso sumanos el casi inexistente tráfico que habeis tenido, pues.....= viaje en moto perfecto 
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....La verdad es que lo hemos pasado de cine....toda la carretera para nosotros, buen tiempo y tranquilidad absoluta sobre la moto...¿qué más se puede pedir?. 
. En cuanto a su eficacia, mejora algo la visibilidad a pleno sol...pero tampoco creas que es la panacea; a poco que el sol incida diréctamente en la pantalla, no se ve un carajo....y eso que llevo un GPS específico para moto, el Zümo 660 de Garmin. También hay que tener en cuenta que yo conduzco siempre con gafas de sol, por lo que la visibilidad de la pantalla se reduce aún mas. En cualquier caso, y la mayor parte del tiempo, la pantalla tiene una visibilidad suficiente....con el "invento" mejora un poco; aún así y todo yo me guío mas de las indicaciones por bluetooth que por por la pantalla, cuya función es complementaria al guiado por voz, del cual disponen todos los navegadores para coche y moto.
...creo que ya me sigues, je, je. . Te aseguro que si la pasta y el tiempo no fueran un impedimento, yo me daba la vuelta mundo...¡¡vive Dios!! 
....de todas formas la ilusión y las ganas de volver el año que viene siguen ahí.