Su composición química
Esta composición utiliza por supuesto una gran parte de caucho pero también numerosos compuestos o elementos químicos como el sílice por ejemplo. La composición exacta de los neumáticos constituye un secreto industrial que es guardado con recelo por los fabricantes.
Se habla en general de “gomas blandas” y de “gomas duras” para distinguir la adherencia de diferentes neumáticos. Una goma blanda ofrece intrínsecamente mayor adherencia que una goma dura.
Su temperatura
A cada neumático, y por lo tanto a cada composición química, corresponde un rango de temperaturas de funcionamiento óptimo. Cada neumático ofrece una adherencia máxima a una temperatura, o en un rango de temperaturas determinada. La adherencia aumenta con la temperatura del neumático hasta una adherencia máxima y luego disminuye (a menudo al mismo tiempo que el neumático lo hace) si la temperatura continua aumentando.
La temperatura de un neumático aumenta en función de los esfuerzos mecánicos a los cuales está sometido: rodar, acelerar, frenar, tomar curvas son numerosas las acciones que aumentan la temperatura de un neumático. De forma general, los neumáticos blandos tienen una temperatura de funcionamiento más elevada que un neumático de goma dura y requieren más tiempo para aumentar su temperatura.
Además de la adherencia específica ofrecida por cada modelo de neumático a una temperatura determinada, cabe resaltar que la adherencia también depende de la superficie de contacto con el suelo y del estado del pavimento sobre la cual se circula. Cuanto mayor sea la superficie de contacto entre el neumático y el pavimento, mayor será la adherencia. A igual anchura de neumático, un neumático sin o con pocos dibujos ofrece por lo tanto un mejor agarre que un neumático con numerosos dibujos. Pero esto sólo es válido sobre pavimento seco.
En efecto sobre suelo mojado, un neumático de gran tamaño con pocos dibujos corre el riesgo de aquaplanning más rápido. El fenómeno de aquaplanning es la pérdida de adherencia del neumático con la carretera. Una superficie de contacto reducida a cero equivale a una adherencia reducida a cero. El papel de los dibujos es evacuar el agua y evitar así la formación de una ola delante del neumático, causa del fenómeno de aquaplanning.
Neumático de moto de carretera

Los neumáticos “carretera” o “touring” están hechos de gomas duras con una temperatura de funcionamiento baja y rápidamente alcanzada. Ofrecen una buena adherencia y llevan en general numerosos dibujos, que los hacen muy seguros sobre pavimento mojado. El uso de gomas duras les confiere una longevidad muy buena.
Debido a la rapidez de su puesta en acción (temperatura de funcionamiento baja), se recomiendan estos neumáticos para los trayectos urbanos. También se pueden utilizar perfectamente estos neumáticos para hacer viajes o paseos. Sólo un uso deportivo podría quizás alcanzar los límites de su adherencia.
Neumático de moto mixto

Los neumáticos “mixtos” o “trail” están montados sobre motos capaces de salir del asfalto y rodar sobre caminos de tierra. Como su nombre indica permiten por lo tanto un uso mixto asfalto/tierra. Su principal característica es presentar, sobre todo sobre el neumático trasero, dibujos muy anchos, segmentando el neumático en tacos con el fin de ofrecer una mejor motricidad sobre suelos blandos.
En general, estos neumáticos están constituidos por gomas duras, tienen una temperatura de funcionamiento relativamente baja y una muy buena longevidad. Ofrecen una buena adherencia pero inferior a neumáticos de carretera puros debido a la anchura de los dibujos que disminuye la superficie de contacto al suelo.
Estos neumáticos están indicados para un uso mixto carretera/camino. En carretera, permiten un amplio abanico de usos pero se alcanzará el límite de adherencia más rápidamente debido a su menor superficie de contacto con el suelo. Para un motero que circula principalmente en carretera, es por lo tanto preferible elegir neumáticos de carretera en vez de un neumático mixto.
Rodaje de neumáticos de moto
Los neumáticos nuevos deben su aspecto brillante a los productos utilizados para su desmoldeo, un lubrificante llamado “cera de desmoldeo”. Este lubrificante hace que un neumático nuevo sea extremadamente deslizante. Por lo que es primordial rodar el neumático suavemente durante 30 a 50 Km, el tiempo que el desgaste normal elimine la cera de desmoldeo de la superficie del neumático y que éste pueda ofrecer su adherencia normal.
Durante estas primeras decenas de kilómetros se aconseja ser progresivo, rodar como lo haría sobre una superficie deslizante: sin aceleraciones, frenadas o cambios de dirección bruscos y tomas de ángulo progresivo.
El desgaste de los neumáticos de moto
El grado de desgaste de un neumático se mide gracias a los testigos de desgaste presentes en los dibujos. Cuando se alcanza este testigo de desgaste, es necesario cambiar el neumático ya que este testigo significa que el neumático ha alcanzado la altura de goma mínima legal. Incluso se aconseja no esperar tanto tiempo y cambiar el neumático antes. En primer lugar, porque con el desgaste, los surcos de los dibujos pierden en profundidad y mengua su capacidad para evacuar el agua. Cuando llueve, con respecto a un neumático nuevo, los riesgos de aquaplanning aumentan, y la adherencia es menor. Una vez alcanzado el testigo, el neumático ha perdido su capacidad para evacuar el agua.
Posteriormente, independientemente de la profundidad de los dibujos, el neumático pierde sus calidades con los ciclos de temperaturas. Cada vez que se circula, el neumático está sometido a un ciclo de temperaturas: se calienta y luego se enfría. La repetición de estos ciclos acaba por alterar las calidades del neumático. En particular, pierde adherencia.
Por último, incluso sin rodar, un neumático envejece y se endurece simplemente con el tiempo. El material y la estructura del neumático acaban por perder sus cualidades. Este envejecimiento se manifiesta a veces visualmente por resquebrajaduras. Por lo que, si se compra una moto de segunda mano que no ha rodado desde hace un año o más, será imprescindible cambiar los neumáticos aunque estos parezcan poco usados.