Shiro Nakajima, del taller japonés Ritmo Sereno, especializado en restauraciones de BMW, se saca de la manga un modelo de enduro a partir de una BMW R65 de carretera. Como en la mayoría de sus creaciones, Nakajima trabaja en motocicletas que serán usadas en la calle. Motos a la postre prácticas, como las que cada uno de nosotros podemos tener en el garaje.
Montando una horqulla delantera de Honda XR600, un basculante de ocasión de la antigua série GS y recalculando geometrías. El resto se basa en montar todo e incluso fabricar piezas artesanales como el depósito de combustible en aluminio, los escapes, pletinas várias y el protector de cárter motor.
Les ha quedado de primera.
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